domingo, 13 de noviembre de 2016

El Grito


El grito



Edvard Munch ( 1863-1944) fue un pintor expresionista y el mayor exponente del arte moderno, con un trastorno bipolar que distorsionaba la realidad en ese rostro desfigurado, pero un profeta para su tiempo.

Ya predijo el triunfo del nuevo presidente  republicano Donald Trump en estas elecciones americanas y como un Grito de protesta de los americanos contra el sistema socieconómico difícil de entender y de las medidas a tomar.

La expulsión de los emigrantes y la construcción de un nuevo muro en la frontera de Méjico, mayor que el de Berlín.

Un Grito contra las injusticias sociales y diferencias salariales.  

Seguir con las industrias del carbón y petrolíferas en detrimento de las energías renovables blancas y eólicas, llegando al calentamiento global del planeta y deshaciéndose los casquetes polares provocando inundaciones.

En su cuadro el Grito: aprecio unos colores fuertes y violentos, como esas puestas de sol de un rojo intenso, como si fuesen las llamas de un fuego intenso que estuviesen devorando el mundo entero ( explosión nuclear en la actualidad con bombas y armas bélicas).

Esos brochazos tan retorcidos como lo que siente este pintor tan visionario y expresivo, en esa tendencia para pintar llamada expresionismo.

Las aguas revueltas de ese mar embravecido que hacen unas inmensas olas queriendo provocar un gran tsunami.

Esas dos figuras negras que parecen no darse cuenta de la expresión de ese rostro que parece una calavera como las máscaras de terror de la película Scream.

El triunfo de Trump devuelve el miedo a EE:UU. Grupos racistas hostigan a las minorías mientras crecen las protestas contra el presidente electo.

En éste pintor el dolor y los trastornos mentales son habituales, la enfermedad, la locura y la muerte es un trío constante y permanente.



La mezcla de talento y locura hacen de este pintor un genio dela pintura,

donde este angustioso cuadro al contemplarlo, nos hace llevar las manos al rostro, como queriendo imaginar sus pensamientos cuando lo estaba pintando.

El Grito es un cuadro que solo un visionario pudo haberlo pintado, de una gran fuerza psicológica y una composición agresiva, de gran sufrimiento y sentimiento del autor y es una de las obras más icónicas del arte moderno.


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