EXTRAÑOS COMPAÑEROS DE CAMA
Es el arte de la política
el hacer extraños compañeros de cama, debe ser el ansia viva de querer estar
siempre mandando en la cima.
La autoría de esta frase
original unos se la atribuyen a Kissinger, otros a Groucho Marx, pero la
versión más fiable es la que argumenta que la dijo Winston Churchill.
Esta frase es una
sentencia británica que en su día expuso Manuel Fraga para explicar su alianza
con López Rodó, con quién las había tenido tiesas, a pesar de que en el consejo
de ministros habían compartido mesa.
Este dicho cínico y
lúcido, es algo ya tópico, de tan obvio que se trenzan y deshacen alianzas ante
la mirada atónita del ciudadano que tributa y vota.
Pero una cosa es meterse
juntos en el mismo lecho y darse gustirrinín y tan agustito y otra gobernar
juntos.
Algunos políticos creen
que existen los Reyes Magos, pero me temo que, como cualquier adulto estos
dirigentes deben saber que los Reyes Magos son los papás y si no lo saben
pronto en la Comunidad Europea se lo dirán.
Pero una mañana de éstas
despertaran con jaqueca, cada oveja se irá con su pareja y aquí paz y luego
gloria.
Cuando los extraños compañeros de cama
se dedican a hacer manitas
viene a crujirlos el tío de la Vara
como parodia Juán Mota.
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