MARCHANDO UNA DE CHURROS
Paseando voy por las
calles del viejo Cáceres en esta temprana mañana de un viernes del mes de
noviembre, veo a la gente correr a resguardarse en las tabernas y bares pues el
frio viento invita a tomar un calentito café.
Y es que cuando el grajo vuela bajo
es que hace un frio del carajo
y cuando el grajo se posa en los balcones
hace un frio de c…… y lo que sigue..jejeje…
Movido por un extraño
resorte y como curioso impenitente en una tasquita me adentro, en una mesita
del fondo me siento a leer la prensa y tomarme un cafetito con churros que me
reconforta por dentro.
Apenas ya un alfiler si
cabe pero sigue entrando la gente, quizás el origen sea debido a que por un euro
te dan dos porras y un cafetito.
Y es que en éste Cáceres
del alma mía hay alrededor de veinticuatro churrerías y la competencia es tanta
que pelean por ver quien se lleva el pato al agua.
San Blas, Factory,
Hermanos Ruiz, J.Carlos, Sanarra, Olgui, El Erre, La Picha, Carmen Barquilla,
Juan Manuel Blázquez, Pérez Burdalo, Panceres, S:A Laboral, El Horno de
Gretel, Mario Duque Ortega, Domingo
Montero Pascual, Esther Pérez Guerrero, Mª Jesús Quintero Ramajo, Horno
artesano La Tradición, Lucía María Iglesias Macías, Regalado Regalado,C.B,
Carlos Mariano Vaquero Santano, Londres, La Montaña y San Blas r 66.
A mi mente vienen las letras graciosas
que cantaba la charanga en las ferias
yo quiero casarme con la churrera
para estar todo el día churro dentro, churro fuera…jajaja….
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