CARCEL VIRICA
En la cárcel de mi casa me veo todos los días
sin matar ni haber robao
porque el mortal virus corona
me tiene medio acojonao.
A mí razones me sobran
para odiar a esta corona que no es de realeza
por obligarme a estar encerrado aquí
ojalá con la resistencia lo pueda combatir.
Y así pasar veo los días
entre lecturas, escritos y alguna tabla de gimnasia
pero se hace tan larga la espera
más que para los novios su cita primera.
Es una extraña sensación
para el que no tengo ninguna preparación
como si hubiese ocurrido una guerra nuclear
y ningún ser vivo fuese a quedar.
Pero tengo la esperanza y certeza
que pronto una vacuna aparezca
para acabar con esta maldita pandemia
y cambiar alegrías por tristezas.
Que esta pesadilla quede en mi recuerdo
como si hubiese sido un mal sueño
y que todos los gobiernos tomen nota
para que esto jamás ocurra.
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