TIEMPO
DE FALSAS PROMESAS
Algún
que otro insensato
que
se presenta para presidente de gobierno
sin
tener aún el bastón de mando
ya
se cree el rey del mambo.
Algunos
son de la vieja escuela
de
los que dicen ponerme donde haya
que
ya vaciaré yo la cartera
y
luego salga el sol por donde salga.
Otros
mucho prometer
hasta
alcanzar el poder
y
una vez que arriba se ven
el
que venga detrás que arreé.
Pero
yo le recuerdo
que
para conseguir todo esto
hay
que atarse los machos
que
no todo el monte es orégano.
Suele
ser algún politiquillo
de
esos de tipo chiquilicuatre
del
tres al cuarto
que
le viene grande el traje.
Se
le llena la boca
de
contar falsas promesas
como
la vecina tóxica
que
pone a todo volumen la música
cuando
va hacer limpieza.
Sin
apenas darse cuenta
que
por la boca muere el pez
y
que a los votantes de nuestra tierra
solo
se les engaña una vez.
Y
como el pueblo es soberano
para
primeros de mayo
con
todo el recuento de votos
ya
sabremos el resultado.
Entonces
algún que otro insensato
que
se presentaba para presidente de gobierno
se
marchará con el rabo entre las patas
dando
por respuesta la callada
y
aquí paz y luego gloria.
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