El que esté
libre de culpa…….
La verdad es que no sé por dónde empezar hoy las letras de este escrito,
aunque después de los últimos acontecimientos ocurridos en ésta agrupación
musical, de la que me siento tan orgulloso de pertenecer.
Más que ser los chicos del coro parecemos una jaula de grillos, basta ser
que unos digan blanco para que otros digan amarillo y otros digan negro, como
si estuviésemos en el gobierno de nación.
Tenemos una directora musical más grande que un Castillo que se encarga de dirigir y enseñar a cantar las
partituras dándonos la correspondiente nota.
Una junta directiva que se encarga de la organización, asuntos monetarios,
política de fichajes y actuaciones y que deberían imponer orden y concierto
ante tantos despropósitos y desgobiernos.
El resto de los componentes del Orfeón debemos apoyarlos en todas y cada
una de las propuestas y decisiones, como Fuenteovejuna todos a una y si en algo
discrepamos, procurando no dar la nota expresar nuestras opiniones, ya que
hablando se entiende la gente.
Y si todos y cada uno de los afiliados que componemos esta agrupación no
sentamos la cabeza y ponemos remedio, puede que esta agrupación musical sufra
algún fuerte descalabro y desaparezca en poco tiempo o al menos se marchen
varios de sus componentes disgustados ante tanto descontento.
Debemos hacer una seria reflexión y un verdadero examen de conciencia,
musicalmente hablando, ahora estamos a tiempo de poner remedio y evitar que
todo este arduo trabajo termine en la papelera y se vaya a hacer puñetas.
Soy el primero en reconocer que el que esté libre de culpa que tire la
primera piedra, no vayamos a confirmar el dicho de que entre todos la mataron y
ella sola se murió.
Parece mentira que ahora que hemos logrado la medalla de Extremadura
estemos con estos tira y afloja, enfados por tantas niñerías.
Creo que todos y cada uno de los componentes de éste Orfeón merecemos un
respeto y tenemos el perfecto derecho de dejar y abandonar libremente este
Orfeón si no estamos con el de acuerdo.
Tenemos un duro y arduo camino por recorrer, con varios conciertos y ojalá
seamos la envidia de todos los que nos vayan a ver y hayamos podido para
entonces haber limado asperezas y nuestras voces unidas se escuchen dentro y
fuera de nuestras fronteras, siendo la admiración de todos los que nos rodean.
Con cincuenta y cuatro años de antigüedad a las espaldas este Orfeón, el
decano de los grupos musicales cacereños desea seguir ofreciendo por muchos
años lo mejor de sus componentes en los conciertos.
Gracias a todos por pertenecer a este maravilloso Orfeón, que puede que no
sea el mejor de todas las agrupaciones y corales musicales, pero para cada uno
de sus componentes debe ser el más querido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario