Esta mañana me he levantado
de buen humor
escribiré poemas al amor y al
desamor
que son los que gustan un
montón,
con un poquito de ironía y
agudeza
intentando escribir un
canalla poema
y que cada uno saque su
propia moraleja.
Por culpa de estos versos
malditos
que no sé cómo voy a empezar
a escribirlos
como esa calenturienta gente
que anda por las calles
buscando condones para hacer
el amor a las putas a las doce de la noche,
sin público y sin miedo al escenario
sigo intentando componer pero
al mirarme en el espejo
me encuentro ensimismado y consumido
entre vasos de wiski y
cigarrillos.
Entrando en un antro lleno de
putas
de garrafón barato y en su
penumbra,
entre una copa y otra
nos metemos unas rayitas de
coca
creyéndonos haber alcanzado
el éxtasis, la gloria.
Una vez que estábamos ciegos
y hasta el culo
sin poder pagar al no tener
un puto duro
a patadas nos arrojaron de
aquél tugurio,
en el asfalto del suelo
terminamos hacinados
como dos maricas agarrados de
la mano
llenos de golpes en nuestras
posaderas y traseros
escuchando una canción de
Sabina fumando un canuto
y después ya lo dice el
eslogan, de Madrid al cielo.
Por culpa de unos versos
malditos
no sabiendo su final ni su
principio
ni como darles el finiquito,
me encuentro metido en este
laberinto
de putas, alcohol y porretas
que me han dejado sin perras
y muy floja y sin botones la
bragueta.
Veo monjas y curas con sotana
algún que otro con la barba
cana
pichaflojas y abrazafarolas,
que en céntricas calles muy
oscuras
están dándole al manubrio a
ciertas horas
en que debían estar dormidos
en sus casas
y es que por una se pierde la
otra cabeza.
Que una cosa es predicar
desde el pulpito
intentando con gran
predicamento
que cojamos miedo a las
llamas del infierno,
y otra muy distinta es dar
trigo
porque cuando las ganas de
joder aprietan
ni los traseros de los más
beatos se respetan,
y es que en cosas de la
jodienda
ni jodiendo hay cristiano que
lo entienda.
Al final estos versos
malditos van saliendo
con algo de sorna y mucho
trabajo
no sé si tendrán mucho arte y
salero
pero la verdad es que yo he
disfrutado un huevo
componiéndolos me he reído un
buen rato
espero y deseo sean de
vuestro agrado.
Y es que en éstos versos
canallas
Muchas veces el que otorga,
calla
que conste que no es por llevar
la contraria
lo que pretendía era escribir
unas cuartetas
me han salido cualquier cosa
menos ellas
y después salga el sol por
Antequera.
Aunque me tilden de poeta
canalla
en estos momentos no pienso
en arrojar la toalla,
y aunque la poseía no debe
ser cursi
pero las canciones puede que
si
estando muy agustito aquí
me fumo un cigarrillo y me
tomo un wiski
de este poema me siento más
que poeta, arlequín.