domingo, 15 de octubre de 2017

El maldito geniezucho


El maldito geniezucho
 
Últimamente estoy que no me reconozco
será por lo largo e intenso de este verano,
por esos malditos calores de solano
que llegue yo a estar trastornado.
 
Mis estados de ánimos son imprevisibles
llegando a estar bastante irascible,
las razones y los motivos
no llego a comprenderlos.
 
Podré llegar a estar perdiendo el juicio
aunque parece ser que esto viene de antiguo,
y si no llego a pararme y refrenarlo
puedo llegar a perder lo que más quiero.
 
Este maldito geniezucho
con el que llego a hacer tanto daño,
que puede con el paso del tiempo
me quede a solas con mis pensamientos.
 
Para poder remediar todo esto
sin perecer en el intento,
debo hacer fuerte propósito de la enmienda
intentando no volver a errar y meter la pata.
 
No sé si me estaré volviendo majareta
y llegaré a perder la cabeza,
espero y deseo salir bien parado de esta
para no perder lo que más me importa.
 
La razón no tiene nada más que un camino
o me tranquilizo y cambio,
o voy de cabeza al suelo
dándome un gran testarazo.
 
Puedo llegar a perderlo todo
a familiares y amigos,
a los que más quiero y adoro
por este geniezucho del carajo.
 
Nadie dijo que fuera fácil esta gesta
pero debo finalmente vencerla,
pondré todo mi tesón y empeño
para llegar a ver realizado este sueño.
 
Debo aprender de mis errores
de los actuales y los anteriores,
y en un orden de prioridades
la familia y los amigos son los más importantes.
 
¿ Por qué hago que esta vida sea tan cuesta arriba?
cuando las cosas son tan sencillas
que si pongo un poquito de buena voluntad
podré seguir teniendo tu amor y amistad.
 
Será que soy más bruto que un arado
y más tozudo que un burro,
y no quisiera ir aprendiendo
a base de ir recibiendo una jartá de palos.
 
Si sobreentiendo que tengo algo de intelecto
mis fallos y faltas debo ir rectificando,
y ahora que ya soy abuelo
tengo la edad idónea para ello.

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