jueves, 24 de diciembre de 2015

La vieja Nochebuena


Era una Nochebuena muy antigua

del tiempo de Maricastañas,

cuando vivía mi abuela

aún me acuerdo de ella.

 

En que hacía un frio del carajo

por lo que el grajo volaba muy bajo,

se cimbreaban los cipreses solitarios

que existían en el cementerio.

 

Pero era el día de Nochebuena

en casa se preparaba una opípara cena,

qué bien olía el guiso del pollo de corral

y brindar a los postres con sidra que sustituía al champan.

 

Bien abrigados

íbamos a pedir el aguinaldo,

en el pueblo, de casa en casa

cantando villancicos que a todos nos alegraban.

 

En la radio de los abuelos

se escuchaban cantes flamencos,

y con el discurso del dictador Franco

nos quedábamos todos embelesados.

 

Eran días de turrón y mazapán

que nos endulzaba el paladar,

al calor del fuego de la chimenea

escuchábamos como el aire movía la arboleda.

 

Era una Nochebuena muy antigua

en que nos juntábamos tropecientos en familia,

alrededor del portal de belén villancicos y risas

ahora viejos recuerdos de hermosas vivencias.
 

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Translate