AL GORRÓN
Dice un dicho popular
que miseria no le faltó nunca al mísero
ni al gastoso
dineros para gastar.
Los hay de puño cerrado
y no por ser de izquierdas
no sacan las manos del bolsillo
por no invitar nunca una convidada.
Pero aprovechan los tantos
y acuden a los bares todos los días
acercándose a los incautos
para sonsacarles algún vino o cerveza.
Y no es porque no tengan dineros
es una cualidad innata en su naturaleza
y aunque se les ve desde lejos el plumero
no les importa al no tener vergüenza.
De esta clase de tipejos
estoy hasta los coturros
ya me duele hasta la boca
de cantarles las cuarenta.
Lo hago público y notorio
a todos los gorrones que salen de bares a diario
es un aviso a navegantes
para que no intenten nada sonsacarme.
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