LXXI
Sera el polvo
del desierto
que nubla parte
de mi universo,
o el calor que
desprende mi cuerpo
lo más parecido
al fuego eterno.
Mirando a lo
lejos el cielo
no se ve nada
claro,
por la inmensa
llanura
se divisa como
una densa bruma.
El sol permanece
oculto
se ven algunos
ligeros rayos muy difusos,
una ligera marea
que quema
corre procedente
del llano a la sierra.
Veo por la calle
gente ligeramente mareada
completamente sofocadas,
el día invita a
meterse en la ducha
para aplacar
tanta calorina.
Es como para
darnos un pasmo
con éste calor
tan alto,
recomiendan las
autoridades sanitarias
marcharse a la
piscina o a la playa.
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