LAS CALLES DESIERTAS
Hace apenas un momento que vengo de comprar la prensa
y compruebo en vivo y en directo que las calles están desiertas.
Me recuerdan a ésas películas de terror que veía de
pequeño como si fuese el fin del mundo después de una guerra bacteriológica.
Pero lo que es verdaderamente cierto que para intentar
acabar con este virus asesino lo mejor es sufrir resignadamente la cuarentena
durante al menos una quincena para intentar detener esta pandemia.
La cosa no es para menos ya que ha ocasionado
muchísimos muertos y los contagios se cuentan por millares ojalá por el bien de
todos esto muy pronto pare.
Publican algunos medios que es un invento de Israel y
Estados Unidos para detener el avance económico de los chinos y que los autores
tienen ya en sus manos el antídoto.
Suponiéndose que esta noticia fuese cierta abría a los
autores que cogerlos por las pelotas y a todos ellos quemarlos en la hoguera
como al Peropalo en Villanueva de la Vera.
Me recuerda a nuestros envenenamientos cuando lo del
aceite de colza y es que algunos desalmados con tal de ganar dinero no les
importa envenenar a la humanidad entera.
Después si es que conseguimos erradicar esta pandemia nos
espera una gran crisis económica, las clases pobres y medias se irán hacer
puñetas enriqueciéndose una vez más las clases poderosas.
Ojalá todo esto sea un falso bulo y puedan desmentirlo
los gobiernos del mundo y como Fuenteovejuna todos a una a investigar para
encontrar pronto una vacuna.
Las calles desiertas
en Cáceres capital
es un acierto total
para detener esta pandemia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario